El correcto funcionamiento de los sistemas térmicos industriales depende en gran medida del estado en que se encuentren los intercambiadores. Con el tiempo, estos equipos acumulan residuos, incrustaciones y suciedad que disminuyen su capacidad de transferencia de calor, elevan el consumo energético y pueden generar fallas costosas. La limpieza de intercambiadores de calor industriales se convierte entonces en una tarea crítica dentro del mantenimiento preventivo de cualquier planta.
Con una limpieza adecuada, no sólo se extiende la vida útil del equipo, sino que también se garantiza una operación más eficiente y segura. Existen diversas metodologías que permiten limpiar un intercambiador de placas sin necesidad de desmontarlo, minimizando tiempos muertos y reduciendo costos operativos.
Cuando se trata de mantenimiento de intercambiadores de calor, una de las prácticas más efectivas es la limpieza periódica de las placas internas. Estos equipos, al estar en contacto con fluidos térmicos, son propensos a la acumulación de sarro, algas, óxidos y otros sedimentos que pueden obstruir el paso del fluido o disminuir la superficie de contacto térmico.
Uno de los procedimientos más recomendados actualmente es la limpieza térmica sin desmontar, la cual permite eliminar depósitos sin necesidad de abrir completamente el equipo. Este método utiliza productos químicos especialmente formulados para remover residuos sin dañar los materiales de las placas o juntas.
Reducción de tiempos de inactividad
Menores riesgos de daño mecánico
Eficiencia en la ejecución del servicio
Ahorro en mano de obra especializada
En ciertas ocasiones, especialmente cuando los niveles de suciedad son críticos, sí es necesario desmontar el intercambiador. En esos casos, la limpieza de placas internas se realiza manualmente o con sistemas de alta presión, asegurando que cada canal y superficie quede libre de obstrucciones.
No existe una regla única para todos los equipos, pero lo recomendable es realizar una revisión al menos una vez al año. En industrias con alta carga de sólidos o condiciones extremas, puede ser necesario hacerlo con mayor frecuencia. Llevar un control técnico de presión diferencial y eficiencia térmica puede ayudarle a determinar cuándo es momento de limpiar un intercambiador de placas.
La eficiencia en los procesos térmicos depende directamente de la limpieza del equipo. Una acumulación mínima de sedimentos puede provocar una pérdida significativa de transferencia de calor. Por eso, la limpieza para eficiencia térmica no debe verse como un gasto, sino como una inversión operativa.
Existen soluciones químicas específicas diseñadas para la limpieza de intercambiadores de calor industriales, las cuales eliminan incrustaciones sin comprometer las superficies metálicas. En Altihp trabajamos con formulaciones certificadas y procesos adaptados a cada tipo de equipo y condiciones operativas.
Tipo de fluido térmico que ha circulado
Material de las placas y juntas
Presión y temperatura operativa del sistema
Tiempo de operación desde el último mantenimiento
Estos factores ayudan a definir el método y productos más adecuados para su caso particular.
La correcta limpieza de sistemas de calor genera múltiples beneficios:
Mejora el rendimiento térmico del sistema
Reduce el consumo energético
Prolonga la vida útil del intercambiador
Disminuye los riesgos de paros inesperados
El servicio técnico especializado le ayudará a establecer un programa de mantenimiento de intercambiadores de calor eficiente y acorde a las necesidades de su planta.
Si desea ponerse en contacto con nosotros puede escribirnos, llamarnos o dejarnos un mensaje, le responderemos a la brevedad, estaremos felices de colaborar con su empresa.
Oaxaca 8, Col. Los Olivos, C.P. 52916, Atizapán de Zaragoza, Edo. de Méx
Oaxaca 8,
Col. Los Olivos,
C.P. 52916,
Atizapán de Zaragoza, Edo. de Méx.